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Serena y Venus, o brindar por el tenis

Con cinco coronas de Wimbledon cada una, las hermanas Williams vuelven a cruzarse en Londres después de la final disputada hace seis años y de 25 duelos entre ambas

Alejandro Ciriza
Serena y Venus, tras la final de Wimbledon en 2002.
Serena y Venus, tras la final de Wimbledon en 2002.Ted S. Warren (AP)

Han pasado, nada más y nada menos, que 17 años desde que se cruzaran por primera vez en una pista del circuito profesional; fue en la segunda ronda del Abierto de Australia, en 1998. Y han transcurrido, otra friolera de tiempo, 15 años desde que se midieran por primera vez sobre la pradera del All England Tennis Club, en las semifinales de 2000. “Creo que somos más maduras, todavía muy tenaces. Creo, después de todo, que éramos divertidas de ver… y que todavía lo somos”, dice Venus, 35 años, la mayor de las Williams.

Serena domina en duelos directos: 14-11 en total, 7-5 en torneos grandes y 3-2 sobre el tapete de Wimbledon

El caso es que hoy, después de la tradicional jornada de transición del Middle Sunday –Wimbledon se detiene en su domingo intersemanal– volverá a encontrarse en el camino con su hermanísima Serena, la número uno indiscutible, 33 años. “Es una pena que sea tan pronto”, lamenta esta. “Ella es mi hermana hoy, la semana que viene o el próximo año, y eso es más importante que cualquier partido, pero seguro que lo daremos todo sobre la pista”, añadía la number one, que después de enlazar el Abierto de Australia y Roland Garros aspira en este 2015 a dar otro paso hacia el Grand Slam.

Solo Maureen Connolly (1953), Margaret Court (1970) y Steffi Graf (1988) han logrado hacerse con los cuatro majors en una misma temporada. De momento, para avanzar unos centímetros hacia la marca, Serena tendrá que batir hoy a su hermana Venus, con la que se entrena estos días en la zona del Aorangi Park. “Ella me ha inspirado a mí, a mucha gente. Su historia es sencillamente increíble”, desliza la menor de las Williams, dominadora en los duelos entre ambas –14-11 en total, 7-5 en pulsos correspondientes a torneos grandes y 3-2 sobre el tapete de Wimbledon)– y en busca, también, de su 21º major.

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“No sé qué ocurrirá, las hemos visto miles de veces jugar”, señala David Witt, preparador de Venus, 16 del mundo. “Para ella es súper especial jugar contra su hermana, primero porque es una súper jugadora, mejor incluso en hierba, y segundo porque es su hermana”, reconoce Patrick Mouratoglou, técnico y pareja sentimental de Serena.

Hoy, La Catedral será testigo de uno de un duelo al que no le queda demasiada cuerda después de 17 temporadas en liza, de un brindis por el tenis. “Es una locura, alucinante”, indica Serena, que enfrente tendrá a una (hermana)rival que acumula, exactamente, los mismos títulos que ella en el torneo más tradicional del tenis: cinco. “Ella ha hecho muchísimo por este deporte, y en concreto, aquí, en términos de igualdad en los premios”, recuerda la menor, en alusión a aquella carta que Venus dirigió a la organización del evento y que por entonces llegó hasta Tony Blair, el primer ministro británico.

Espero que haya más gente animándole a ella. Yo, al menos, lo haría" Serena, sobre Venus

Ambas, Serena y Venus, Venus y Serena, representan dos historias de superación extraordinarias. La reina del circuito sufrió una embolia pulmonar hace cuatro años que le puso al borde de la muerte, mientras que la veterana padece el síndrome de Sjögren, una anomalía que produce la disminución de la energía, fatiga y dolor en las articulaciones. "Yo le aplaudiría a ella", dice Venus. "Pues yo espero que haya más gente animándole a ella. Yo, al menos, así lo haría", dice Serena, que en la ronda previa tuvo un encuentro muy exigente frente a la británica Heather Watson, y a los aficionados claramente a favor de la jugadora de casa.

La última vez que midieron sus fuerzas fue el año pasado, en Canadá. Hoy, pase lo que pase, el público de Londres se levantará y aplaudirá. Un brindis por ellas, no cabe duda. Por los viejos tiempos. Larga vida a las hermanas Williams.

VÍDEO: La final de Wimbledon entre Serena y Venus en 2009.

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Sobre la firma

Alejandro Ciriza
Cubre la información de tenis desde 2015. Melbourne, París, Londres y Nueva York, su ruta anual. Escala en los Juegos Olímpicos de Tokio. Se incorporó a EL PAÍS en 2007 y previamente trabajó en Localia (deportes), Telecinco (informativos) y As (fútbol). Licenciado en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Navarra. Autor de ‘¡Vamos, Rafa!’.

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