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Llull: “Tenemos que defender muy fuerte y jugar en transición”

España se reafirma en el ideario de “defensa, rebote y transición” para derrotar a Italia y encarrilar la clasificación

Faustino Sáez
Llull en el partido frente a Turquía.
Llull en el partido frente a Turquía.Juan Carlos Hidalgo (EFE)

La frase se repite en el vestuario de la selección española en distintos formatos, pero la esencia es la misma: ni la derrota ante la Serbia subcampeona del mundo (70-80) era para dramatizar, ni el zarandeo ante una quebradiza Turquía (77-104) es para tirar cohetes.

Esta noche, ante Italia (21.00, Cuatro), el conjunto de Scariolo desempatará el 1-1 de su casillero y decantará los argumentos a favor del optimismo o del pesimismo. “Esperamos un partido muy duro porque son un equipo con mucho talento, con jugadores NBA, y tienen como nosotros la necesidad de la victoria. Es el choque clave para la clasificación”, explica Sergio Llull

Del 3 de 19 en triples y la contundente inferioridad en el rebote (32-44) del primer día, al 12 de 21 desde el 6,75, las 24 asistencias y la aportación coral de 6 jugadores por encima de los 10 puntos del segundo partido, España ha llevado a cabo un ejercicio de autoafirmación que le resulta históricamente reconocible. “Estamos bien. Se trata de aprender, corregir cosas y crecer”, reitera la plantilla y el cuerpo técnico antes de medirse a una Italia renqueante a la que las lesiones han desmontado su armazón NBA con la baja de Datome y la duda de Belinelli.

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Tras una preparación apacible, bajo el amparo de su público, sin ensayar en territorio hostil, con rivales amables alejados de la primera línea del escalafón y sin opción para memorizar situaciones exigentes y finales en el funámbulo, Serbia aplicó el factor corrector a las conclusiones de la ruta Ñ. Pero los biorritmos y el engranaje del equipo mejoran en progresión aritmética conforme avanza el torneo. Italia medirá los progresos.

“A pesar de las bajas, tienen arsenal suficiente para romper el partido y vamos a tener que estar muy atentos en defensa. Es un equipo que nos viene mal porque no tienen un cinco claro, pueden hacer muchas trampas atrás, son muy físicos y si tienen el día te pueden matar desde fuera por su potencial exterior. En defensa tampoco son unas madres, en un Europeo de este nivel no hay equipos flojos en defensa”, retoma Llull, uno de los más destacados ante Turquía (+27 con él en pista). “Se trata de hacer lo que hicimos en el segundo partido. Defender muy fuerte y jugar en transición que es el juego que mejor nos va y con el que nos sentimos cómodos. Hay que intentar explotar esa virtud”, remata el base del Real Madrid.

El ideario está claro. “Cuando defendemos y reboteamos todo fluye”, explica Sergio Rodríguez. “Después, los tiros entran porque llegamos en mejores situaciones. El acierto hay que trabajarlo, pero la defensa tiene que ser fuerte siempre”, refrenda El Chacho. La Italia del baloncesto no conoce el catenaccio y apuesta por la inspiración. Berlín mide el choque de talentos con la victoria de los azzurri en Eslovenia hace dos años como último precedente.

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Sobre la firma

Faustino Sáez
Es redactor de deportes del diario EL PAÍS, especializado en baloncesto. Además del seguimiento de ACB y Euroliga, ha cubierto in situ Copas, Final Four, Europeos y Mundiales con las selecciones masculina y femenina. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y ha desarrollado toda su carrera en EL PAÍS.

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