“Quedar por delante de Rossi no es ninguna quimera”
Jorge Lorenzo está convencido de que puede ganar el Mundial a pesar de los 23 puntos con los que el italiano salió de Misano
Apenas dos días después de la última carrera del mundial de motociclismo, cuando Jorge Lorenzo terminó volando por los aires, el piloto de Yamaha apareció por la Fnac, en pleno centro de Barcelona, con tejanos y una de esas camisetas de la firma de ropa que ha puesto en marcha, Skull Rider, para promocionar teléfonos móviles llegados desde china. Tal cual. Pero no vende cuentos chinos el piloto mallorquín, que además de ofrecer su imagen a la empresa Zopo, uno de los gigantes asiáticos (dos millones de teléfonos vendidos en 2014) que por vez primera busca abrirse mercado en Europa desde España, explica que está dispuesto a pelear y convencido de que puede ganar el Mundial.
Pese a Valentino Rossi, claro. Que tiene, de momento, 23 puntos de ventaja al frente de la clasificación.
Cuando me caí inmediatamente pensé que el Mundial estaba perdido, pero no cedí tantos puntos como pensaba” Jorge Lorenzo, piloto de Yamaha
“Me duele casi todo el cuerpo, pero he estado mucho peor”, concedió el piloto, que el domingo se cayó a gran velocidad, en plena carrera, dio unas cuántas vueltas sobre sí mismo por la escapatoria del circuito de Misano, se golpeó la cabeza y se hizo daño en la muñeca derecha. Pero salvo un ligero mareo y aquella pequeña dolencia no hubo que lamentar males mayores. “Fue una caída aparatosa, pero esta vez no me hice nada. Cuando sales por los aires con estas motos que tienen tanta inercia te puedes hacer mucho daño, pero por fortuna salió cara”, bromeó.
Y hasta se sintió aliviado cuando era atendido en la clínica móvil del circuito, según confesó, pues esperaba que Rossi le recortara muchos más puntos de los que al final le sacó: “Cuando me caí inmediatamente pensé que el Mundial estaba perdido, pero no cedí tantos puntos como pensaba. Eso y saber que soy más rápido que él, que normalmente tengo ese medio segundo más de velocidad, me hace pensar que ser primero o segundo en todas las carreras que quedan no es ninguna quimera”. Y añadía, porque ha hecho las cuentas: “Ni siquiera tengo que ganar todas las carreras, tengo que quedar por delante de él en el podio al menos en cuatro grandes premios, y en alguno recortarle algunos puntos más. No es ni mucho menos imposible”.
El de Yamaha siente que con algo menos de presión, pues ahora es el que persigue, no el que defiende el liderato, podrá pilotar mejor.
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