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Con Neymar hasta el final

Desde el Barcelona consideran al extremo intransferible y confían en recuperar su mejor versión ante el Espanyol

Jordi Quixano
Neymar, en el último duelo ante el Betis.
Neymar, en el último duelo ante el Betis.MARCELO DEL POZO (REUTERS)

El Camp Nou ha pitado a Neymar. Fue en el penúltimo encuentro liguero, ante el Sporting, en una de esas noches que lo intentaba todo y no le salía nada. Sobre todo la definición, indeciso a la hora de encarar al portero, nulo en el remate. Pero cuando le volvió a temblar el pulso, cuando la portería menguó a sus ojos, esta vez la gente le ovacionó, un grito de aliento porque se sabe que si no está bien no es por absentismo, sino que le falta la chispa y la ousadía que tantos aplausos de su hinchada como críticas de las rivales provocó. Luego, correspondió con un gol. “En ese partido se vio lo que se le quiere; le piden más porque desean que siempre juegue igual de bien, pero saben que nunca deja de intentarlo”, explican desde el Barça; “las críticas son desmesuradas y quizá algunos lo hacen para intentar desestabilizar”. Por eso, desde el club azulgrana conversaron de pasada con él, con la idea de naturalizar un proceso que entienden lógico en el fútbol. Al tiempo, confían en que recupere su mejor versión frente al Espanyol, en el derbi de este fin de semana del Camp Nou.

Rafinha y Alves, a la Copa América

Convocatoria. Dunga, seleccionador de Brasil, dio ayer la lista para la disputa de la Copa América, que se celebrará del 3 al 26 de junio en Estados Unidos. Con la baja segura de Neymar, que irá a los JJ OO, el técnico ha citado a dos jugadores del Barcelona: Dani Alves y Rafinha, que volverá a tener la oportunidad de jugar con la selección absoluta tras debutar con el conjunto de Dunga en el mes de septiembre.

Cinco 'españoles' acudirán al torneo: Diego Alves (Valencia), el lateral Filipe Luis (Atlético) y el mediocentro Casemiro (Real Madrid) acompañarán a los dos azulgrana. Como bajas significativas cabe destacar a Kaká (Orlando City), Danilo y Marcelo (Real Madrid), Oscar (Chelsea), Lucas Moura y David Luiz (PSG).

Aunque ha maquillado sus números en los últimos encuentros, a Neymar no le ha salido un buen final de curso, a buen seguro porque no estaba bien físicamente. “Es humano y ha sido un año largo. Estamos encantados con él y Ney siempre nos expresa su felicidad de jugar aquí. No le podemos pedir más”, dicen desde las oficinas del club. Ocurre, sin embargo, que al 11 le han criticado por todos los frentes, desde el seleccionador de Brasil —por sus peinados y por airear sus fiestas— hasta instituciones como el campeón del mundo Mario Zagallo, que le tildó de inmaduro. Además de enredos judiciales por su fichaje con el Barça. “No creemos que le haya afectado”, apuntan desde la entidad. Y se suma otra voz del club: “No se le ha visto inquieto. Para estar aquí hay que tener una mente privilegiada para gestionar todo lo que rodea a un jugador del primer equipo, y él la tiene”.

Aunque hubo también un momento de conflicto, cuando el futbolista solicitó jugar la Copa América y los Juegos Olímpicos de Brasil, petición a la que el Barça se negó. “Eso era demasiado, viene de una temporada muy exigente y con desgaste”, cuentan. Y, aunque la Confederación Brasileña presionó —envió un comunicado diciendo que haría lo posible para contar con él en los dos eventos—, el jugador acató la resolución sin lamentos. “Prefería los Juegos, le hacían especial ilusión. Así que acordamos que participara en ese torneo, por más que vaya a contrapié con la pretemporada”, explican; “y lo ha entendido como profesional que es”.

Trabajo extra

Es ese, precisamente, un aspecto que destacan de Neymar. “Además de lo que se entrena en el club, refuerza el trabajo con un equipo de personas que le ayudan a mantener el tono. Sabe que su fútbol es el de un bailarín que flota y por eso rema en ese sentido”, resuelven desde el Barça. Y desde las oficinas añaden: “Parece que es liviano, pero todo lo contrario. Pero no se puede exceder porque sabe que no debe perder la elasticidad ni la arrancada; es su juego”. Condiciones capitales para el club, que no quiere oír hablar de un traspaso, sino que aguarda a publicitar su renovación. “Es intransferible, no queremos que se vaya de ninguna de las maneras”, exponen desde el club; “y ojalá el año que viene ofrezca el mismo rendimiento que ha dado en este. No le pedimos que dé un paso al frente, sino que se mantenga”.

Ahora se mide con el Espanyol, equipo contra el que no ha perdido: cinco duelos en la Liga (cuatro triunfos y un empate); y una victoria en la Copa. Su saldo: dos goles y una asistencia. “Sabemos que pronto va a ofrecer de nuevo su mejor nivel, y ojalá ya sea ante el Espanyol”, dicen desde la entidad azulgrana. Y desde las altas esferas, añaden: “Por su incidencia en el juego y por su demarcación, es un jugador vital. Le necesitamos en estos partidos y estamos seguros de que lo intentará como siempre. Compromiso no le falta”. El Barça tiene claro que con Neymar, hasta el final.

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