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El Barcelona y el delantero que no llega

Limitado por la masa salarial y por la feroz competencia en la línea de ataque, el club azulgrana mantiene abierta la búsqueda del ariete

Jordi Quixano
Vietto, festeja un gol con el Atlético, que lo ha cedido al Sevilla.
Vietto, festeja un gol con el Atlético, que lo ha cedido al Sevilla.EFE

Durante el invierno pasado, el Barça quiso fichar a Nolito, entonces extremo del Celta. Pero las negociaciones se torcieron porque el club gallego exigió 18 millones, un precio demasiado alto para la entidad azulgrana en esos momentos. “Teníamos el ebitda y unos ratios que cumplir antes de acabar el ejercicio, y esa operación suponía saltárnoslos, del mismo modo que tampoco era posible por las limitaciones de la masa salarial, que ya está bastante justa”, convienen desde las oficinas del Barça. Después, alcanzado el verano, cuando fueron a preguntar de nuevo, se encontraron con que el futbolista se había decantado por la oferta del Manchester City. “La razón es que me gustó mucho trabajar con Guardiola en el Barcelona, a pesar de que no fuera por mucho tiempo”, señala Nolito. Pero ya no era una preferencia para el Barcelona, toda vez que, renovado Munir, el objetivo era un delantero centro. “Uno que tenga gol”, definió Luis Enrique. “A poder ser joven, con proyección, y que tenga experiencia en la Liga”, añaden desde el club. Y en esas siguen.

Mascherano, tres temporadas más

El Barcelona cerró ayer la renovación y la mejora de contrato del central Javier Mascherano, que flirteó con la Juventus hasta el punto de llegar a un acuerdo económico. Pero dio marcha atrás cuando el Barcelona le revisó su salario y le expresó la confianza que mantiene en él. “Ha ocurrido lo que sabíamos que iba a ocurrir. Estamos muy satisfechos”, constató Robert Fernández.

El Barça se propuso de partida fichar a Gameiro. Pero cuando el Sevilla reclamó 40 millones, decidieron dar marcha atrás porque les parecía excesivo y porque no cumplía con esa idea de rejuvenecer la plantilla, como lo expresan los fichajes realizados hasta la fecha: Digne (23), Umtiti (22) y André Gomes (22 pero cumplirá años este sábado). Por lo que se fijaron en Gabriel Jesús (19), delantero del Palmeiras que no dice ni sí ni no, sino todo lo contrario porque aguarda a la mejor de las ofertas. Y ha tenido unas cuantas, como la del Barça, de la Juve e incluso del Manchester City. “Lo hemos perdido y el otro —a Gabigol, del Santos, se refieren— no es tan bueno”, llegaron a admitir desde el Barcelona porque el agente del jugador les dijo que el City le pagaba más, algo con lo que no puede competir el Barcelona por el escaso margen que tienen con la masa salarial. Gabriel Jesús, sin embargo, sigue en el candelero hasta que se diga lo contrario.

Calabazas de Vietto

Con el que ya no cuentan es con Vietto, que se va al Sevilla porque considera que tendrá más minutos, sabedor de que con Messi, Luis Suárez y Neymar no puede ser titular. “No valoró lo que le ofrecimos”, se lamentan desde el Barcelona; “porque es un jugador joven que podía haberse desarrollado con los mejores jugadores a su alrededor. Y hubiese aprendido más que en ningún otro sitio”. De la misma manera opina el director deportivo Robert Fernández: “En este club hay que escuchar a lo que tienes enfrente. Se ha de estar preparado para aprender. Si tienes la humildad y eres consciente, tarde o temprano tienes la oportunidad”. Pero Vietto no lo vio así y el club sigue con el enigma del delantero. “Llegará cuando tenga que llegar”, resuelve Fernández. “Estamos tranquilos porque el 90% de los jugadores quiere venir al Barça”, agregan desde la entidad.

No tiene prisas el club por traer al cuarto refuerzo porque quedan 33 días para cerrar para cerrar el mercado. “Tenemos una lista amplia de delanteros en cartera”, explican. Uno es Lucas Pérez, pero sus pretensiones económicas vuelven a chocar con los límites de la masa salarial. Hay más, aunque se resisten a decirlos “porque podría entorpecer las negociaciones”. No esconden, sin embargo, que como Vietto pueden darse de bruces con la realidad, con la competencia casi inhumana que se da en el ataque. “Los tres de arriba son muy buenos y eso lo dificulta”, acepta Robert Fernández; “pero no lo cambio”.

Es lo único que le falta al Barcelona porque cuando se abrió la ventana de traspasos los objetivos eran un central, un lateral izquierdo y el delantero. Andre Gomes, sin embargo, no estaba contemplado, pero surgió la ocasión y la agarraron con fuerza porque gustaba tanto al entrenador como al área deportiva. La laguna, entonces, sigue en la punta de ataque y el Barça, según su secretario técnico, abre ya el abanico. “Puede ser un jugador joven o experimentado. Estamos abiertos a todo. Hay muchas alternativas donde escoger”, abunda Fernández. Pero pasados los días, ya son menos.

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