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Estados Unidos luce como un ‘dream team’ del agua ante España

Las campeonas olímpicas castigan con un severo correctivo la desconcertante puesta en escena del equipo de Miki Oca

Anni Espar lanza ante una Maggie Steffens.Vídeo: Leonardo Muñoz EFE / EL PAÍS
Robert Álvarez

La repetición de la final olímpica de 2012 se convirtió en una exhibición de Estados Unidos y en un calvario para España. Las estadounidenses jugaron con una velocidad y las ideas claras. Y apabullaron a la selección que dirige Miki Oca. Neushul batió a Laura Ester cuando apenas se había cumplido medio minuto y a partir de ahí se configuró un partido absolutamente dominado por las estadounidenses. Jugaron con el porte de los ‘dream teams’ de baloncesto. España no dio la sensación de ser la aspirante a romper el abrumador dominio del equipo campeón de todo, Juegos (2012), Mundial (2015), World League (2016) y World Cup (2014). Por lo visto en su estreno olímpico, se trata de un equipo que no solo acapara títulos sino que impone el rodillo de su calidad de una forma disuasoria.

ESPAÑA, 4; ESTADOS UNIDOS, 11

España: Laura Ester (Patricia Ramos); Bach, Anni Espar (1), Bea Ortiz (1), Clara Espar, Peña, Forca, Tarragó, Maica García (2), Laura López y Leitón.

Estados Unidos: Johnson; Musselman (1), Seidemann, Fattal (1), Clark (1), Stefens (2), Matthewson (2), Neushul (2), Fischer, Gilchrist, Fischer (1) y Craig (1).

Parciales: 1-4, 1-3, 2-2 y 0-2.

Centro Acuático Maria Lenk. Unos 3.000 espectadores.

La defensa española fue zarandeada por el ataque estadounidense ya en el primer cuarto (1-4). Laura Ester no pudo evitar los goles de todas las facturas que obtuvieron Neushul, Musselman y Craig, desde las esquinas, por elevación, en tiros desde el centro. Miki Oca decidió cambiar de portera en la segunda parte y dio entrada a Patricia Ramos.

La defensa de las estadounidenses fue muy presionante. Lo pagaron con exclusiones que España no aprovechó. Ru Tarragó, Anni Espar y Laura López no afinaron en los disparos. Estados Unidos convirtió en gol los tres tiros de los que dispuso con inferioridad numérica de España. Cuando la situación fue a la inversa, en cambio, el ataque español solo obtuvo un tanto en las cuatro ocasiones en las que el equipo americano estaba diezmado.

La defensa estadounidense presionó muy arriba y dejó muy escasas posibilidades de tiros cercanos. Cuando Estados Unidos sufría alguna exclusión se encerraba como un caparazón. En el tercer cuarto, con 2-7 en el marcador, España encontró por fin algún camino hacia el gol. Maica García recibió dos buenos pases y desde la posición de boya batió dos veces a Ashleig Johnson, la portera estadounidense que completó una espléndida actuación. Fue la única fase en que España trató de tú a tú a su rival. Pero pagó su flojísimo porcentaje de acierto en el remate, de un 19%, frente al 52% que obtuvo Estados Unidos.

El equipo de Oca necesita mejorar de manera exponencial e inmediata para afrontar sus compromisos ante Hungría y China para afrontar el cruce de cuartos de final en una buena posición y, sobre todo, para ganar confianza y quitarse el mal sabor de boca que dejó su estreno.

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Sobre la firma

Robert Álvarez
Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona, se incorporó a EL PAÍS en 1988. Anteriormente trabajó en La Hoja del Lunes, El Noticiero Universal y el diari Avui.

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