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Colombia prepara la primera edición de la Liga femenina de fútbol

El próximo febrero arrancará la competición con un presupuesto menor al torneo masculino

Sally Palomino
El equipo femenino de Independiente Santa Fe.
El equipo femenino de Independiente Santa Fe. ARCHIVO PARTICULAR

Yoreli Rincón creció con el fútbol. Su papá tenía una fábrica de balones y ella le ayudaba a coserlos. Desde los cuatro años empezó a jugar con ellos, a patearlos. Su afición la llevó a que en 2012, con 19 años, se convirtiera en la primera jugadora de fútbol profesional de Colombia al vincularse con el XV de Piracicaba de Brasil. Como volante de la selección femenina, fue una de las jugadoras que pidió – y soñó, según sus palabras-, que se formalizara profesionalmente ese deporte en el país. Ahora, a los 23 años, es una de las mujeres que jugará en la Liga Femenina Águila, el torneo que se iniciará en febrero del próximo año a la par que el campeonato masculino.

“El reto es poder mostrar el lindo espectáculo que es el fútbol y que le respondamos al público por el apoyo que nos ha dado y que nos permitió llegar acá”, dice Rincón. La primera edición del torneo contará con 18 clubes y estará dividido en tres grupos que jugarán en 16 ciudades y en 17 estadios del país. Solo dos de los grandes equipos masculinos –América de Cali e Independiente Santa Fe- han decidido crear una división femenina. La jugadora prefiere no opinar sobre ello y confía en que a medida de que avance el torneo y se consolide la liga, se unan otros clubes y le den la oportunidad a las mujeres de llevar sus camisetas.

“Son decisiones que corresponden a las directivas de los equipos, pero esperamos que el buen fútbol termine por integrar a todos los que también juegan en la liga masculina”, asegura Rincón en referencia sobre la decisión de los grandes clubes de no invertir dinero en el fútbol femenino, al que aún le queda camino por recorrer. “Tenemos que ser conscientes de que no podemos vivir solo de esto. Es una oportunidad que todavía empieza ahora y que tomará tiempo para que garantice ingresos iguales a los de los hombres”, dice. Rincón cuenta que para equilibrar su vida en la cancha con el tema laboral, decidió crear una empresa. Tiene una fábrica de uniformes deportivos y de productos de belleza, que trata de compatibilizar con sus entrenamientos diarios “El gran momento de la liga será en cuatro años cuando tenga la reputación por la que desde el otro año empezaremos a trabajar”, asegura.

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Aunque solo faltan cuatro meses para que inicie el torneo y aún quedan detalles por definir, la idea es que los partidos de la liga femenina se jueguen antes de los masculinos, cada domingo. “Nuestras exigencias en cuanto a sueldos y apoyo deberán ir a la par de cómo crece el campo de las jugadoras profesionales en Colombia, habrá que ser pacientes hasta que se consolide el juego”, advierte la deportista que liderará el equipo Patriotas (Boyacá).

Leicy Santos, de 20 años, coincide con Rincón en decir que la profesionalización del fútbol femenino en Colombia es “un sueño hecho realidad”. Después de insistirle a sus papás que dejaran la venta de pescado en su pueblo, Lorica, en el norte del país, para buscar en Bogotá alguna posibilidad con el fútbol, dice que el sacrificio valió la pena. “Esta es la oportunidad más grande, se abren las puertas del fútbol para todas las que creemos en este deporte. Me vine de mi pueblo con ese sueño y ya empieza a cumplirse”, dice la mediocampista de la Selección de fútbol colombiana, que desde febrero se vestirá de rojo con la camiseta de Independiente Santa Fe, uno de los clubes con más tradición en el país.

“Sabemos que pese al nivel profesional en el que entramos, tenemos que hacer algo adicional, hay que buscar otras alternativas en el tema económico”, dice. Es entrenadora de un equipo de fútbol femenino en un colegio, estudia inglés y el próximo semestre empezará a cursar administración de empresas. Todo esto, mientras entrena y se prepara para demostrar, como dice ella, el alto nivel del fútbol de mujeres en Colombia. El equipo que resulte campeón representará al país en la Copa Libertadores Femenina. Además, competirán con el campeón de la Liga de España y recibirán becas para estudiar. “Importa ganar, pero sobre todo hacer buen fútbol y enviar el mensaje de que este deporte debe ser de respeto y tolerancia”, dice la jugadora.

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Sobre la firma

Sally Palomino
Redactora de EL PAÍS América desde Bogotá. Ha sido reportera de la revista 'Semana' en su formato digital y editora web del diario 'El Tiempo'. Su trabajo periodístico se ha concentrado en temas sobre violencia de género, conflicto armado y derechos humanos.

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