_
_
_
_
_
FÓRMULA 1 | GP DE ESPAÑA

“Peleamos por ser los terceros”

Fernando Alonso, sexto después de adelantar a su compañero Raikkonen, admite que no es una “sorpresa” el dominio de sus rivales y habla de luchar por el certamen de constructores

O. PUIGDEMONT
Raikkonen, por delante de Fernando Alonso
Raikkonen, por delante de Fernando Alonsovicens gimenez

Existe un código establecido en la fórmula 1 y que la mayoría de escuderías sigue a rajatabla para ahorrarse problemas con sus pilotos, y es aquel que establece que en el fragor de la batalla, el corredor que circula delante es el que tiene preferencia cuando llega el momento de entrar a cambiar los neumáticos.

En Montmeló, Kimi Raikkonen circuló la mayor parte del tiempo por delante de Fernando Alonso, que le superó a falta de cuatro vueltas para el banderazo de cuadros, beneficiado por la estrategia que siguió el asturiano, que visitó los garajes en tres ocasiones mientras que su compañero solo lo hizo en dos. A posteriori, la opción de Alonso terminó siendo más efectiva que la del finlandés, que nada más terminar la carrera se dirigió a sus ingenieros para pedirles explicaciones por considerarse perjudicado.

“Quien te saca una vuelta puede rodar con tranquilidad”, asegura el piloto asturiano

El mosqueo del Hombre de Hielo es, probablemente, el problema más pequeño que Ferrari tiene a día de hoy. Aunque nadie se atreva a reconocerlo públicamente porque hacerlo dañaría la imagen de la marca, parece más que evidente que ni un solo miembro de la tropa de Maranello se plantea llegar al tramo final del curso con opciones de pelear por nada que no sea la tercera posición de la clasificación reservada a los pilotos, y la segunda en el caso del apartado de constructores.

La última victoria de Alonso se produjo la temporada pasada en este mismo escenario. En aquella ocasión, el bicampeón del mundo dejó al primer Mercedes (Rosberg) a más de un minuto de distancia y dobló al segundo (Hamilton). Un año después, los papeles se invirtieron y las dos flechas plateadas le sacaron a Kimi más de una vuelta y se quedaron a tres o cuatro segundos de hacer lo mismo con el ovetense. El nórdico volverá a subirse mañana al F14T en la primera de las dos jornadas de ensayos programadas, con la intención de revitalizar el prototipo de il cavallino rampante. Aunque cueste creerlo, el bólido rojo ha dado un paso adelante en relación con el que condujo Alonso en China, hace tres semanas, y le permitió subirse al podio. Lo que ha ocurrido es que los hay que han trabajado mejor.

Alonso saluda a los aficionados en Montmeló.
Alonso saluda a los aficionados en Montmeló.LLUIS GENE (AFP)

“Mercedes tiene una ventaja muy importante a su favor, tanto en puntos como en prestaciones. Si se lo propone incluso puede ganar todas las carreras. Lo tiene todo en su mano. Quien te saca una vuelta puede rodar con tranquilidad”, reconoció Alonso nada más abandonar el corralito. “De todas formas”, añadió acto seguido, “no es una sorpresa porque llevamos viendo este dominio desde el primer día. Al margen de Mercedes, que corre en otra Liga, nosotros tenemos que pelear por ser los terceros, o sea los primeros del resto, y por la segunda plaza en el Mundial de constructores”.

El viernes, Luca Di Montezemolo, el presidente de Ferrari, apareció por el circuito y habló, aunque no dijo mucho. Aseguró que esta vez sí, que está más implicado que nunca en la Scuderia, e incluso aseguró que no se separa de Marco Mattiacci, el nuevo director que en China asumió el relevo de Stefano Domenicali, para que lleve a cabo una inmersión total y aprenda las inercias de la división de F-1.

“Si se lo propone, Mercedes puede ganar todas las carreras. Lo tiene en su mano”

La intervención de Montezemolo duró una media hora, y durante todo ese tiempo Mattiacci permaneció a su lado sin abrir la boca. Aseguró el ejecutivo que los tifosi deben marcar con una X el Gran Premio de Canadá (8 de junio), que será entonces donde se podrá constatar la reacción del equipo. Aunque a algunos aficionados de la escudería italiana les cuesta creerle cuando echan la vista atrás y se dan cuenta de que este discurso es calcado al de los últimos años, en los que Ferrari ha perdido su hegemonía en los circuitos. Primero fue a manos de Red Bull, el gran dominador de las últimas temporadas con Vettel al frente, y ahora ante Mercedes, con la dupla Hamilton-Rosberg casi siempre en lo más alto del podio. Ferrari mira hacia arriba.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_