_
_
_
_
_
Comienza el curso político

Madrid arranca en Copenhague

La vida municipal estará condicionada por la cita olímpica de octubre - El 'caso Guateque', la deuda y la elección del candidato del PSM marcarán la agenda

Daniel Verdú

Ávido de acontecimientos como anda el mundo, no es extraño que la capital de España se aferre para el próximo curso político a una fecha concreta. Una cifra que, a modo de cábala, configura ya el mapa político municipal para la rentrée vacacional: 2-10-2009. Todo gira alrededor de esos siete números. Del día en que saldrá de Copenhague el nombre de la ciudad que organice los Juegos Olímpicos de 2016.

Esa tarde Gallardón sabrá si puede fiar lo que queda de mandato y el programa de la próxima legislatura a la materialización del sueño olímpico. Será el día en que el PSM tendrá vía libre para mirar sin complejos en su despensa -y atrapar las miradas ajenas- para encontrar un candidato capaz de hacer frente a las dos mayorías absolutas seguidas de su oponente. Y será también el momento en que IU certificará que hay que trabajar como hasta ahora, "más denuncias y poner el foco del trabajo en los barrios", dicen. Con o sin los esperados Juegos. Que por cierto, pasan también por la cita del próximo miércoles, cuando el COI pondrá nota a las cuatro candidatas.

Los objetivos del Ayuntamiento serán salir de la recesión y las obras de Serrano
Más información
El futuro está en los juzgados
Madrid 2016 invita a la designación de la sede olímpica en Copenhague

Y pase lo que pase tras el déjà vu de Copenhague, algunas claves de la agenda anual se empeñarán en seguir su curso natural. Especialmente ahora que, el actual alcalde se ha comprometido a encabezar la lista para la siguiente legislatura y ha removido la brasa moribunda. De nuevo se juzgará con la amenaza del voto a quién, básicamente, es ya el candidato del PP al Ayuntamiento.

Al gobierno municipal le espera un año tranquilo en la gestión. No tenía un duro para realizar la mayoría de proyectos del programa electoral, pero llegó Zapatero con el Plan E y lo resolvió con 554 millones de euros. Tanto, que Gallardón se habrá laminado a finales de diciembre un porcentaje altísimo de lo que le quedaba por hacer hasta 2011. Incluido la reforma parcial del eje Prado Recoletos y el 70% de Madrid Río.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Pero tendrá que lidiar todavía con la polémica y larga reforma de la calle de Serrano y la aprobación por parte de la Comunidad de la remodelación del Paseo del Prado. Y en eso, Gallardón tendrá que pelear con la presidenta, Esperanza Aguirre. Otra cita ineludible en la agenda anual.

Y con todo ya tan avanzado, la idea ahora es poner a circular los planes de la siguiente legislatura. Un concepto de ciudad que mira al flamante río y donde la remodelación de Legazpi será una pieza fundamental. Sin embargo, pese a la bucólica prospectiva, otra cifra endiablada, la de los 7.000 millones de deuda, perseguirá durante bastante tiempo a Gallardón. No hay dinero para hacer nada sin endeudarse todavía más. Por ello, el concejal de Hacienda, Juan Bravo, presentará por primera en la historia, unos presupuestos menores que los del año anterior.

Y si la deuda es alta, la crisis no cesa. Madrid saldará antes que el resto de España de la recesión. Pero todavía hay que esperar casi un año. El concejal de Economía, Miguel Ángel Villanueva, espera que "el indicador negativo se convierta en positivo en el segundo semestre de 2010".

En los tribunales arden ahora mismo varios fuegos. Veremos quién se quema. En la primera parrilla está el Guateque. El caso de corrupción municipal en la concesión de licencias que ha llegado a tener 80 imputados. Para animar el caso, hace sólo tres meses, el juez Santiago Torres pidió información (se espera que luego les llame como testigos o imputados) de cuatro concejales y 12 altos cargos más del gobierno municipal. Hasta ahora el gobierno de Gallardón ha conseguido imputar la responsabilidad del caso a un reducto de funcionarios. Si alguno de sus cargos se sienta ante el juez, tendrá que imaginar un nuevo discurso.

Y, precisamente, a raíz del Guateque, en 2010 se pondrá en marcha el nuevo sistema de tramitación de licencias. Un proyecto que privatizará parte de la concesión de los permisos y que el Ayuntamiento espera que solvente los problemas que dieron pie a la corrupción. "Eso", dicen en la oposición, "no hará más que institucionalizar el Guateque".

¿Qué hará el PSOE ante la gestión del gobierno y en el resto de asuntos? Se entiende que oposición. Pero veremos a quién se le encarga esa tarea cronificada en los socialistas madrileños. En las casas de apuestas suenan desde las renovadas músicas del ministro de Educación, Ángel Gabilondo, la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, el actual portavoz municipal, David Lucas... hasta el tradicional soniquete de Javier Solana o Alfredo Pérez Rubalcaba. Pero nada. Son sólo conjeturas. Lo crean o no, nadie tiene ni idea. Y, sobre todo, nadie tiene un nombre capaz de terminar de golpe con el imperio Gallardón.

En el PSM aseguran que será una decisión que se tome de su flamante y polémica sede de Callao. Lo dice Tomás Gómez. Pero otros se sonríen y recuerdan que, en todo caso, sería la primera vez en años. La última, recuerden, fue el experimento del actual ministro de Industria, Miguel Sebastián: lo decidió Zapatero tras la negativa de sus ministros Bono y de la Vega y se saldó con los peores resultados de la historia socialista en el Ayuntamiento. En cualquier caso, en octubre se celebrará el congreso socialista del que saldrá el esperado redentor.

En Izquierda Unida no tienen prisa. Ya se verá. En principio, hasta 2010 no piensan nombrar a su candidato. Pero nadie duda de que el actual portavoz, Ángel Pérez, lo tiene todo para repetir. Ni siquiera el grupo que tradicionalmente ha estado enfrentado a Pérez dentro de su partido. Los resultados le avalan y las encuestas le pronostican una suerte pareja en los siguientes comicios.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Daniel Verdú
Nació en Barcelona en 1980. Aprendió el oficio en la sección de Local de Madrid de El País. Pasó por las áreas de Cultura y Reportajes, desde donde fue también enviado a diversos atentados islamistas en Francia o a Fukushima. Hoy es corresponsal en Roma y el Vaticano. Cada lunes firma una columna sobre los ritos del 'calcio'.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_